El responsable del Área de Bromatología de la Municipalidad de Río Tercero, Martín Caggia, advirtió sobre los crecientes casos de triquinosis en la provincia de Córdoba, destacando que a diferencia de años anteriores los brotes ya no están limitados a una sola temporada. “Antes era típico ver estos casos en agosto, pero ahora pueden surgir en cualquier época del año”, expresó Caggia, preocupándose por la creciente faena clandestina de cerdos y la compra de productos en lugares no autorizados.
Caggia explicó que los brotes de triquinosis, como el reciente caso en Río Tercero, se deben en gran parte a la venta ambulante de chorizos y salames que no han pasado por los controles sanitarios necesarios. “La gente debe ser responsable al momento de comprar, adquirir embutidos en lugares no autorizados es un riesgo”, señaló, agregando que la triquinosis tarda entre 15 y 18 días en manifestarse, lo que complica la investigación para rastrear su origen.
El especialista subrayó que las carnicerías que adquieren carne de frigoríficos autorizados no deberían tener carne infectada, ya que esos establecimientos realizan los análisis correspondientes para descartar la presencia del parásito. Además, Caggia alertó sobre el consumo de productos como bondiolas, jamón crudo y salames, que no pasan por un proceso de cocción y por lo tanto representan un mayor riesgo de transmisión del parásito.
En cuanto a las medidas de control, Caggia destacó la labor de los inspectores de bromatología que revisan los establecimientos y los carritos de comida ambulante en la ciudad, asegurando que los productos cuenten con la cadena de frío adecuada y la documentación correspondiente. También hizo un llamado a la población a evitar la compra de embutidos caseros elaborados en condiciones no controladas.
Finalmente, Caggia enfatizó la importancia de consumir productos de origen seguro para prevenir enfermedades, recordando que los brotes de triquinosis, aunque esporádicos, pueden tener consecuencias graves para la salud.