En una entrevista cargada de anécdotas, emociones y risas, Alisa Danilova compartió en LV26 su historia de vida: es rusa, vive en Córdoba, juega al tenis y al pádel, eligió Argentina como su nuevo hogar.
“Recorrí casi 50 países, viví en Europa, pero como Argentina no hay” aseguró, explicando que lo que más valora es la calidez de la gente y la falta de discriminación. Llegó hace un tiempo junto a su marido —con quien no tiene hijos, pero sí “perros y trofeos”— y desde entonces se siente como en casa. “Córdoba es especial, la gente me recibió con los brazos abiertos”.
Ambos trabajan de manera remota: él es programador y ella se dedica al marketing digital. Esta modalidad les permite vivir en cualquier parte del mundo, pero Argentina los conquistó.
Alisa también contó que dejó su país por la difícil situación generada por la guerra. “Es un tema muy doloroso. Corté muchas relaciones, incluso con mi familia, que sigue en Moscú. Fue duro, pero encontré muchos amigos acá que me ayudan a sanar”.
Aunque aún le cuesta con algunas frases locales, habla español con fluidez y se ríe de los malentendidos con el “nuevo” y las expresiones argentinas. “Aprendimos primero solo a decir ‘gracias’, entonces todos pensaban que éramos súper amables”, bromeó. También admitió que el fútbol y las tribunas le enseñaron todas las malas palabras en tiempo récord.
“Estoy feliz acá, quiero quedarme”, dijo Alisa, cerrando con un “Spasiba” (gracias) y dejando claro que, aunque vino de muy lejos, en Argentina encontró su lugar en el mundo.